A su vez, está Luna Llena experimentará un eclipse, el segundo de este año (el primero fue el 11 de febrero, como posiblemente recordemos).
Como les comenté en aquél entonces, los eclipses por lo general traen cambios y transformación a nuestras vidas, y tienden a "explotar" los puntos débiles de cualquier situación, es decir, a sembrar cierto grado de caos en los puntos débiles de determinadas situaciones o circunstancias, propiciando así la generación de cambios necesarios y de nuevos comienzos. El qué tanto nos pueda afectar un eclipse dependerá mucho del qué tan apegados estemos a nuestras circunstancias actuales y qué tanto o qué tan poco dispuestos estemos a soltar y dejar ir allí donde el eclipse afinque su acción transformadora. Y, los eclipses de Luna Llena tienden, por lo general, a tener un mayor campo de influencia en el plano de las relaciones.
Este eclipse en particular, ocurre en el eje Acuario-Leo, lo cual sugiere que estará relacionado, a nivel individual, con las expresión del "Yo" (Leo), a través de las relaciones públicas, de la vida social, de los grupos (Acuario). Dicho en otros términos, puede que empecemos a cuestionarnos nuestro papel en el colectivo, en la comunidad, que empecemos a cuestionarnos la forma en que nos relacionamos ante nuestro entorno social inmediato. Sentiremos la tendencia o la inclinación a hacer un a pausa en nuestra vida social, por grande o pequeña que pueda ser, e ingresar a un período de mayor introspección, en el cual cuestionamos lo que estamos haciendo en el plano social, nuestro papel ante los grupos de personas, o el entorno en que nos encontramos como tal. En ese sentido, no es de extrañar que uno de los efectos de este eclipse sea la renovación de nuestro círculo social, de nuestro entorno de amistades, y/o de la forma en que nos relacionamos. El Sol va a estar en conjunción con Marte y con el Nodo Norte durante este eclipse, mientras que la Luna lo estará con el Nodo Sur. Esto me sugiere, que el efecto de este eclipse propiciará situaciones que nos empujarán a cerrar un ciclo con personas o situaciones emocionales que están ya caducas en nuestra vida. O con una forma muy emocional de reaccionar o de ver las cosas.
A nivel colectivo, tenemos que el Sol se encontrará en Leo, su propio signo, al momento del eclipse, lo cual puede, nuevamente a nivel de colectivo, interpretarse como gobernantes, figuras de poder. El Sol, y más aún encontrándose en Leo, es "el rey", "el emperador", "el príncipe", la figura de poder. La Luna, por otro lado, que en esta forma de Astrología representa a "el pueblo", "la plebe", la población gobernada, me habla de un cambio drástico ( y dependiendo del país diría que más drástico aún) en la conexión emocional entre el gobernante y los gobernados. Un cambio en la percepción, en la opinión pública, y/o en el vínculo entre ambos. E, igualmente ya como una opinión personal, serían cambios preparatorios, para otros más profundos que se activarían en el eclipse solar que ocurrirá en dos semanas, y de cuyas características hablaré posteriormente.
En resumen, es un eclipse que en lo individual renovará nuestra estructura social, nuestra relación con los demás, y sacará de nuestras vidas a personas ya caducas en nuestro camino, así como emociones que ya no nos aportan nada constructivo. Y en lo social, un eclipse que fomentará una desconexión profunda, especialmente a nivel emocional, entre los gobernantes y los gobernados.
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